Cuando uno se compra una nueva Smart TV o un monitor, está deseando conectarlo a la corriente y ponerse a disfrutar de contenido de todo tipo. Aquí no importa si vamos a ver la televisión convencional, una película en streaming o vamos a jugar: lo más importante antes de ponernos a disfrutar es calibrar correctamente la imagen.
Haciendo esto lo que conseguiremos es tener la mayor calidad visual posible. Este proceso no es nada sencillo, especialmente si nos centramos en las opciones avanzadas que tienen las pantallas de Samsung. La buena noticia es que existe una forma automática de calibrarla, y para ello solo necesitarás dos cosas: un dispositivo Android y la aplicación SmartThings.
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¿Por qué calibrar una pantalla Samsung con Smart Things?
Calibrar la imagen de una televisión o de un monitor es una tarea complicada, independientemente del modelo o tipo de dispositivo que tengamos. No importa que tengamos OLED o QLED, aquí lo importante realmente es el ambiente y la habitación donde tengamos la pantalla. La iluminación de la misma tiene mucho que decir, así como otras fuentes de luz artificial que tengamos colocadas en mesas o muebles cercanos.
Si buscamos en Google el modelo de nuestro dispositivo, es común que aparezcan configuraciones óptimas diferentes, unas con valores muy distintos entre sí. Esto ocurre precisamente por lo que hemos comentado más arriba, ya que la configuración puede variar mucho según la habitación donde pensemos colocar la televisión o el monitor.
En ese sentido, la calibración automática que proporciona la aplicación SmartThings de Samsung nos va a permitir ahorrarnos un quebradero de cabeza. Esta es muy sencilla, y aunque tiene dos modos diferentes, si optamos por el más sencillo apenas tardaremos 30 segundos en terminar todo el proceso.
Primer paso: registrar la pantalla en SmartThings
Antes de ponernos con la configuración per se, es necesario que registremos nuestra pantalla en la aplicación de Samsung. Este es un proceso imprescindible que siempre tendremos que hacer en primer lugar. Una vez hecho, la pantalla quedará registrada en la aplicación, y podremos incluso controlarla con el móvil como si este fuera un mando a distancia.
Para ello, abriremos la aplicación SmartThings y pulsaremos el botón con un símbolo más que se encuentra en la parte superior derecha. Nos aparecerá un desplegable en el que tendremos que elegir la opción de 'Añadir dispositivo', y en este punto tenemos dos vías de actuación. Podemos, por un lado, pulsar en 'Añadir' si queremos hacer el proceso manual; por otro lado, lo más sencillo (y recomendable) es pulsar en 'Buscar cerca', en el que la aplicación hará todo el trabajo.
Es muy importante que, para que esto funciones correctamente, tanto el móvil como la pantalla estén conectadas a la misma red. Lo único que nos tocará será introducir en la app un número que aparecerá en la televisión o el monitor, y de esa forma ya tendremos la pantalla dentro de SmartThings.
Cómo utilizar la aplicación para calibrar la imagen, paso a paso
Ahora que ya hemos introducido nuestra pantalla Samsung en la app, toca calibrarla. Simplemente, buscaremos en la app el dispositivo en cuestión y pulsaremos sobre él. Al hacerlo, de forma predeterminada, puede aparecernos un mando a distancia, pero basta con que lo desplacemos hacia abajo para que ya podamos ponernos manos a la obra.
La opción que nos interesa en este caso recibe el nombre de 'Calibración inteligente'. Es posible que, de primeras, esta opción no esté disponible, ya que en ocasiones tarda unos segundos en estarlo.
Al pulsar, podremos comenzar con el proceso de calibración. Para ello, nos aparecerá en pantalla un recuadro de color blanco. Lo que tendremos que hacer será acercar nuestro teléfono móvil a una distancia de entre 1 y 3 centímetros, apuntando siempre con la cámara a dicho recuadro. Hecho esto, le daremos a 'Empezar', siempre manteniendo el móvil lo más quieto posible.
El proceso, que tarda aproximadamente 30 segundos, terminará mostrándonos en pantalla un vídeo. En la aplicación SmartThings nos aparecerán dos opciones: una para mantener los ajustes hechos tras la calibración automática y otra para volver a cómo estaba.
Lo mejor de este proceso automático es que es reversible en todos los casos. Para volver al estado anterior de la imagen, lo único que deberemos hacer será desplazarnos hacia el menú 'Ajustes' y buscar la sección 'Imagen'. En ella, nos iremos a 'Configuración para expertos' y, al final de este apartado, pulsaremos sobre 'Restablecer imagen'.
Imagen | Samsung
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