Respondemos a la pregunta de si los imanes que colocamos en la puerta del frigorífico aumentan el consumo: influye más que eso

Hay muchos mitos repartidos por el mundo, incluso referentes a las neveras. Hoy te resolvemos uno de ellos

Imanes frigorífico
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Los mitos siempre han acompañado al ser humano. Se basan en creencias y leyendas y, aunque no suelen ser hechos comprobados, se quedan con nosotros y pasan a la posteridad.

Actualmente, si algo ayuda a la difusión y expansión de los mitos es internet. Ahora cualquiera puede "demostrar" y dar por sentada cualquier cosa o historia sin una mínima base científica.

Uno de esos mitos modernos es el que persigue a los frigoríficos, afirmando que si pones muchos imanes en sus puertas el consumo de luz se dispara.

Los imanes: más o menos consumo para tu frigorífico

Todos hemos colocado alguna vez un imán en la nevera, bien porque nos servía de adorno o porque nos ofrecía algún tipo de utilidad.

Estos imanes tuvieron mucho éxito en una determinada época, dando lugar al nacimiento del mito de que poner muchos en la nevera, hacía que el consumo del electrodoméstico aumentara.

Muchas marcas fabricantes de este tipo de electrodoméstico ya han ofrecido su postura al respecto, dejando claro que hablamos de un mito muy extendido, pero sin una base científica.

Algunas marcas han manifestado que sí, que los imanes pueden suponer problemas en sus frigoríficos, pero no por el efecto electroestático éstos, sino porque, si se colocan demasiados, suponen un aumento de peso en la puerta, algo que podría provocar que se dañara, acortando la vida útil del frigorífico y causando un mal funcionamiento en caso de que la puerta no cerrara como debía.

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También se ha dejado claro que no hay prueba alguna de que el consumo, la vida útil del dispositivo o los alimentos se viesen afectados por los imanes externos que pudieran colocar los usuarios.

Incluso alguna compañía energética llegó a mencionar el mito declarándolo como falso, ya que los imanes son tan insignificantes para el funcionamiento del refrigerador, que la energía magnética ni siquiera atraviesa las puertas del mismo.

La OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) acepta como cierto que las corrientes eléctricas interactúan en conjunto con los campos magnéticos, aunque aseguran que la que generan los imanes es tan ínfima que no es posible que modifiquen el consumo del frigorífico.

Ahorrar en el consumo del frigorífico

Lo cierto es que existen maneras por las que vas a poder ahorrar luz teniendo el frigorífico encendido permanentemente en la cocina.

Recomendaciones cómo las siguientes sí que te pueden ayudar mucho:

  • Nunca dejes la puerta del frigorífico abierta.
  • Ten ordenado el interior con cada alimento donde debe ir.
  • No bajes la temperatura en exceso.
  • Revisa que las puertas sellan bien el interior.
  • Si tienes comida caliente, espera a que se enfríe antes de meterla en el frigorífico.
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  • Intenta no obstruir las salidas de aire que tiene en su interior el frigorífico.
  • Limpia las gomas de las puertas del frigorífico.
  • Utiliza recipientes para conseguir mejor orden y que los alimentos duren más, siéndole más sencillo al frigorífico mantenerlos a la temperatura adecuada.
  • Intenta no abrir y cerrar la puerta de manera continuada.

Los mitos puede que algunas veces tengan su razón de ser, pero hay ocasiones en las que no tienen cabida, y el caso de los imanes y la puerta del frigorífico es una de ellas. Si este electrodoméstico consume más, no será por los imanes que te has traído de tus viajes por el mundo.

Imágenes | Pixabay (Leo Castrum), Pexels (Meline Benli)

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